viernes, 6 de junio de 2014

Todos con Simón

Llevo tiempo queriendo hablar en el blog sobre un pequeño gran luchador llamado Simón.

Conocí su historia por casualidad hace unas semanas y, desde entonces, me tiene robado el corazón.

Él y su madre, Miriam, son de esas personas que saben lo que es el sufrimiento y saben, sobre todo, lo que es querer vivir, querer seguir adelante a pesar de las dificultades, que en su caso son muchas, muchísimas.

Él, tan pequeñito y a la vez tan grande. Ella, todo amor, sacrificio y espíritu de lucha por sacar adelante a Simón.

Simón tiene veintiún meses y tiene que estar conectado a varias máquinas para poder vivir. Esto ya de por sí es durísimo, yo apenas puedo ni imaginar lo que supone, pero es que, además, la situación actual de crisis les lleva a enfrentarse también cada día a serias dificultades económicas para hacer frente a las facturas y los gastos de fisioterapia y ayudas técnicas para el pequeño.

Si os apetece os animo a haceros seguidores de su página en facebook. Veréis lo dulce que es Simón y la gran mujer que es Miriam. Y ya si llego a alguien que les pueda ayudar, pues tanto mejor!

Para terminar quisiera enviar dos mensajes. El primero dirigido a la administración y sus gestores. Se lo diré muy suavemente: no tenéis vergüenza. Que nuestro sistema no sea capaz de proteger como es debido a una familia así, debería haceros dimitir a todos en bloque por ineptos, por insensibles, por miserables.

El segundo es para esta familia que ha conseguido estremecerme y enternecerme: tenéis todo mi cariño, mi ánimo y mis energías positivas. GRACIAS por ser un ejemplo de cómo seguir adelante cuando todo se te pone en contra.



Edito para escribir lo que nunca hubiera querido haber escrito. El pasado 12 de diciembre Simón falleció y nos deja el único consuelo de haberlo hecho en su casa, junto a su familia y mientras dormía. 

6 comentarios:

  1. No tengo palabras. Ni una, ni media. Bueno, sí, saco palabras para subscribir tu indignación, para eso no me quedo muda, no tienen vergüenza ninguna.
    Seguiré a Simón.
    Un abrazo.

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  2. No conocía la aventura de Simón, por llamarlo de alguna manera, no puedo imaginar lo duro que se hace vivir así, y la fortaleza que se necesita cada día.

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  3. tengo el corazón encogido, qué historia más dura...

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  4. Qué duro amiga, y qué lástima que las noticias y las preocupaciones de los que dirigen el país, sean otras!
    mis mejores deseos!
    un besin

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  5. Odio este tipo de entradas, entiéndeme, lo que quiero decir es que odio que pasen cosas que hagan escribir este tipo de entradas, y más aún odio que tengas que poner un mensaje como el primero. De verdad que no sé cómo no se les cae la cara de vergüenza.

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  6. buf, teniendo a dos historias de enfermedades raras muy cercanas estas cosas me tocan especialmente, muchísimos ánimos a Simón y familia! >.<

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