miércoles, 19 de diciembre de 2012

Cactus y más desdichas

En nuestra última junta de vecinos, aquella en la que fui felizmente investida presidenta de la comunidad, los presentes tuvieron la genial ocurrencia de decidir poner cactus en el portal tras sufrir un par de intentos de robo de las anteriores plantas.

Se creó entonces una comisión que se encargaría de elegirlos y comprarlos. Al poco me vienen con las fotos de los seleccionados.
¿Imagináis una aguja de hacer punto de esas kilométricas y afiladas? Pues así era la espina más pequeña del más pequeño de los que pensaban comprar.

Tras el telele fulminante que sufrí, intenté hacerles entrar en razón primero apelando al sentido común y posteriormente a la pedazo de querella que nos iba a caer cuando algún crío se ensartara en las púas cual brocheta de pollo a la parrilla. Así que se disuelve la comisión de compra de cactus y me toca buscar alguno menos agresivo a mí solita. Qué gran sabio Felipe González cuando hablaba de la soledad del poder...

Tras buscar y rebuscar por internet encuentro unos cactus la mar de rebonitos y para nada hostiles y se lo comento a uno de los miembros de la extinta comisión. 
- ¿Pero dan miedo? Pregunta mientras a mí se me levanta la ceja hasta más allá de la línea del flequillo. 
- Pues no, cenutrio, me hubiera gustado añadir. Y ahí está la gracia, en que no dará miedo tocar el timbre de la puerta, ni acercarte al buzón a recoger el correo, ni ver a tus hijos corriendo por el portal, que bastante miedo da la vida ya de por sí, bastante miedo dais vosotros, añadiría, aunque lógicamente, y por ser tan mal momento para vender nuestra casa y organizar una mudanza exprés, esos pensamientos los guardo para mí.

Pero mis desdichas no acaban en tener que encontrar unos cactus no letales, ni en convencer a una pandilla de vecinos jugando a equipo actimel contra los pequeños hurtos comunitarios. No. Como soy una presidenta olvidadiza y encima no tengo a una Soraya que me lleve los asuntos, por supuesto desconozco qué días viene el jardinero y me planto el día previo a la entrega de los cactus con las jardineras llenas de las plantas anteriores y por supuesto un montón de tierra que hay que quitar. 

Volcar las jardineras no es una opción ya que son de piedra y eso no hay Hulk que lo mueva. Hacerme la sueca tampoco, puesto que me dijeron expresamente en el vivero que necesitaban los tiestos libres. Suerte que soy una persona con recursos y poca vergüenza, porque allá que me planté en el portal con la palita de playa de mi canijo, el cubito y toda mi santa paciencia. Que la imagen debía ser de foto. Quizás hasta puede que algún vecino me la hiciera de estrangis y ahora esté circulando a la velocidad de la luz por los wassaps del barrio. Igual hasta me piden la dimisión y todo como a la concejala de los Yébenes. 

Aunque desgraciadamente, no me caerá esa breva.





PS. La foto es un cactus de tela hecho por Chiribambola. No dejéis de visitar su web para ver las cosas tan preciosísimas que hace esta chica.




14 comentarios:

  1. Menudo "fregao", ya te cayó la extra con la presidencia de la comunidad, como para encima aguantar a la comisión del cáctus... En circunstancias como la que relatas, te das cuenta de cuanto egoísmo hay en el mundo. Y lo malo es que se convive con esa gente :(

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    1. Ni te lo imaginas... Figúrate si son "porculeros" que ahora hay un vecino que dice que él se pincha al recoger el correo... y los cactus elegidos no tienen espinas!
      Lo que tengo que aguantar...
      Un besazo guapa

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  2. Fuí dos años presidenta de la comunidad porque el vicepresidente falleció e hice su turno también. Lo recuerdo como una época llena de líos, discusiones y fobia total a los vecinos jaja. Suerte.

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    1. Yo tengo que confesar que alguna vez he acelerado el paso para no coincidir con alguno en el portal ;)
      Un beso y gracias por desearme suerte, sin duda la necesito!

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  3. jajajjajajjaaj porfaporfaporfa, me invitas a vivir en tu casa un año ??? jajajajajaj
    Casi me da algooooooo

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    1. Te invito un año y hasta dos, pero... tu estás segura de lo que pides?????
      Un beso con sonrisa estresada querida

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  4. Madre mía, que vecindario hermosa, que coyunturas se os presentan tan difíciles de resolver XD la foto final tuya no tiene precio :)

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    1. Si, tenía que habérmela hecho para dejar documento gráfico ;)
      Un besillo!

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  5. Vaya con los vecinos!!, qué desastre, si es que es imposible entrar en razón con ellos!!, menos mal que en mi caso va el Don, yo con aguantarlos por la escalera tengo bastante.
    Seguro que estabas la mar de apañada con tu pala..jejeje.

    Un besoteeeeeee

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    1. En nuestro caso la que se come el marroncete soy yo, de hecho a mi marido cuando le preguntan escurre el bulto que no veas... como si no fuera con él la cosa!
      En fin!
      Un beso enorme guapa

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  6. Joer, qué ingrato es el poder...Y desde luego, vaya pandilla de "sabios"...¿no tienen hijos o qué? Cualquiera sabe que haya donde haya algo con qué pincharse y un niño suelto a su libre albedrío, habrá un niño con un pincho en el dedo...Si es que...
    Mu bueno lo de la palita, jajajajaja!
    Muas!

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    1. Si, el poder es lo peor... jejeje
      Pues éstos son los típicos que tienen ya a los hijos criaditos y no recuerdan lo que era tener pequeños inconscientes incontrolables...
      Ya les llegarán los nietos, ya!!!
      Un besazo guapa

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  7. Jajaja, me parto con la imagen de la pala y el cubito.
    Desde luego que vaya putada lo de ser presidenta. Uff, mi suerte es que aun me quedan unos años.
    Bueno, lo importante, quedaron bien? Les ha parecido bien a todos los vecinos?
    Un besote y... paciencia ;)

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    1. Pues para mi gusto han quedado muy bien, y he de reconocer que a la mayoría le han gustado mucho. Pero como es natural, nunca llueve a gusto de todos...
      Un beso bonita

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